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N 5269 - 6/12/2017

Separata del Boletín Oficial de la Ciudad de Buenos Aires
N 502

confeccionaba un formulario donde constaba el nombre del paciente, día y hora del fallecimiento, sector donde se hallaba internado, todo con la firma del médico que constató el óbito.
Agregó que dicha constancia se realizaba en original y duplicado y una vez completa, se le entregaba en mano al camillero responsable de llevar el cadáver a la Morgue, en dicha constancia el camillero firmaba como constancia de recepción con indicación de hora, luego, al ingresar el cuerpo a la morgue, dicho formulario también es firmado por el responsable de la Morgue, con indicación de la hora y finalizado ello el camillero devolvía el original a la Guardia que a su vez, se la elevaba a la dicente para su archivo, en el despacho del deponente, acotando que dichos formularios estaban numerados.
Aclaró que los formularios fueron elaborados por la Dirección del Hospital a fin de dar cumplimiento a la normativa citada.
Aportó que la Jefatura de Departamento poseía llave de la Morgue, y otra llave estaba en poder del Jefe de la Guardia de cada día, aclarando que al existir personal de Morgue no era necesaria su uso, salvo en hechos que se producían los días inhábiles en donde no habíapersonal de Morgue.
Añadió que en tales casos, el Jefe de la Guardia entregaba la llave al camillero, quien se encargaba de depositar el cuerpo en la Morgue y de registrar dicho ingreso en el libro destinado a tal fin.
Expresó que los cuerpos que iban a la Morgue, se identificaban con una etiqueta puesta en el primer dedo de uno de los pies.
Manifestó que el Servicio de Anatomía Patológica era el área que tenía en guarda el Libro de Cadáveres.
A orden 108, prestó declaración informativa Claudio Oscar Ramírez, Personal de Morgue del Hospital Muñiz, quien explicó que recibía los cadáveres que eran llevados a la Morgue por los camilleros, para luego asentarlos en el libro de actas de ese servicio, constatando previamente los datos del óbito quienes contaban con un rotulo en el pecho, otro en el dedo gordo del pie derecho y otro en la etiqueta de la mortaja bolsa que cubría el cuerpo una vez constatado el nombre y apellido, número de historia clínica, Sala de procedencia, fecha y hora del deceso, volcaba esos datos en el libro de ingreso de cadáveres, que era un libro de actas foliado y luego guardaba el cadáver en la cámara refrigeradora.
Otra tarea que realizaba era entregar el cadáver a los familiares, previo reconocimiento de estos, para lo cual, retiraba el cuerpo de la cámara y una vez que estaba reconocido intervenía el personal de la cochería que colocaba el cuerpo en el féretro.
Dijo que su inmediato superior jerárquico, era la Dra. Alicia Campitelli, Jefa de Anatomía Patológica.
En cuanto al trámite con los cadáveres explicó Ramírez que se había implementado un nuevo sistema, donde el camillero debe llevar el cuerpo con un formulario por duplicado con los datos del occiso, la firma del médico que constató la defunción y la firma del camillero responsable del traslado.
Continuó explicando que al ingresar a la Morgue, el declarante o quien estuviera de turno, debía firmar ese formulario a modo de recepción, quedando el duplicado en su poder y el original debía ser llevado por el camillero al servicio del que provenía el óbito, acotando que ese duplicado luego era entregado en Anatomía Patológica para su archivo.
Agregó que la Morgue estaba cubierta de lunes a viernes de 06 a 24 hs, por lo que de 00 a 06 y los días inhábiles, no había personal de Morgue, siendo esa función asumida por personal